aquellos trabajadores que hacen bien su trabajo, serán recompensados.
Proverbios 27:18 (paráfrasis)
Ella entró a la empresa ganando el sueldo mínimo y en el oficio más bajo, servir café, sacar copias, ir a los trámites.
Era una muchacha atenta y servicial.
Poco a poco se hizo imprescindible, aprendió a guardar silencio ante las infidencias, estudió las variables de una oficina, hizo reemplazos de pos natales o licencias por enfermedad; ella siempre estaba dispuesta a cubrir una falta.
Hubo un tiempo que el jefe enfermó.
Le pidió que ella abriera la oficina, le entregó ciertos documentos, sin darse cuenta había ido logrando la confianza de su jefe y de sus compañeros.
Y su salarió fue aumentando.
Ordenada, honesta y cuidadosa, nunca dejó de dar a los pobres y ofrendar a su iglesia.
Si cuidas a quien te da sombra y te provee alimento, sin duda alguna serás prosperado.
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La noticia del día:
Un cuidador mide una mariposa en el zoo de Dunstable, Gran Bretaña, agosto 2021. (Foto Reuters)
Pues ojalá así fuera siempre como la empleada del relato que sirve para ilustrar la lección o reflexión, pero en la vida real la habrían explotado sin recompensarle bajo el título "empleada de confianza".
ResponderEliminarEstimado Alexander, el relato es real 100%. Solo omití el nombre de la persona. Es una amiga que aún ahora sigue trabajando y ha sido prosperada en ascensos y buen sueldo; su jefe les canceló incluso los meses sin trabajar por la pandemia.
ResponderEliminarHay buenos empleadores también en "la viña del Señor".
Me encanta tu escrito asi de facil no lo analizo saludos desde Miami
ResponderEliminarGracias, Mucha. Saludos.
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