sábado, 13 de noviembre de 2021

El bien de cada día.


Le da ella bien 
y no mal 
Todos los días de su vida. 

Proverbios 31:12 )RV60) 

¡Qué bella está la novia del brazo de su padre camino al altar! 
¡Qué guapo el novio con su traje de gala escoltado por su madre y su padre! 
La perfumada tarde de primavera completa el cuadro para un recuerdo imperecedero. 

He asistido a muchas ceremonias matrimoniales. 
En cada ocasión  me provoca un escalofrío la voz quebrada de la novia prometiendo; cuando el novio reciamente declara palabras que sin duda quiere sostener en el tiempo.
“Todos los días de su vida” es exactamente eso, hacerse bien el uno al otro, darse mutuamente en afectos, respeto, atenciones.

¿Por qué si se empieza tan bien algunos terminan tan mal? 
¿Dónde se fue perdiendo esa lucidez de las promesas? 
¿Dónde quedó la decisión a toda prueba? 
¿Cuándo fue desmoronándose el castillo de ilusiones? 

Día a día la vida se va construyendo la estabilidad hogareña. 
Día a día se destruye. 
Ruego a Dios con todo mi corazón que esa pareja que hizo ayer sus votos se consolide en el tiempo; que sus sueños personales y en conjunto los lleven a la mejor de las vidas en pareja.
***




viernes, 12 de noviembre de 2021

El índice de confianza determina la estabilidad de una pareja.

Esa mujer íntegra ha estimulado la confianza en su esposo; 
gracias a ella, 
él tiene prosperidad.

Proverbios 31:11 (paráfrasis) 

Conocí a Susy cuando era vendedora en una tienda del reatil. 
Estaba de novia con un estudiante que luchaba a brazo partido con las matemáticas. 
Ella le animaba, pagaba parte de la universidad, se privaba de cualquier suntuario, su motivación era ayudarlo. 
Las amigas –nunca faltan las “bien intencionadas”- le alertaban, “tanto que inviertes en él, cuando sea profesional te dejará”, y cosas así. 
No la dejó. 
Es más, se casaron, tuvieron tres niños hermosos y Susy pudo dedicarse a su pasión, hacer orfebrería.
Tomó un curso, instaló una tienda, hoy disfruta a su familia, un hogar tranquilo y confecciona joyas de exportación.
La devoción al Señor da confianza.
La confianza da estabilidad a la familia.
***


jueves, 11 de noviembre de 2021

Diamantes humanos.

Una mujer íntegra, completa, 
¿se podrá hallar? 
Su valor excede por lejos 
a los más bellos y valiosos diamantes. 

Proverbios 31:10 (paráfrasis) 

La mujer perfecta es un arquetipo creado por la literatura. 
No hay algo así como la “mujer ideal”. 
Ni hombres ideales. 
Simplemente hay personas humanas, unas más nobles, otras menos, unas hermosas por fuera y por dentro, otras menos. 
Para la mayoría de los niños su madre es la mejor, la más bella, la más valiente y trabajadora. Es lo que nos muestra Lemuel, una mujer que formó su vida con sabios consejos; la describe con minuciosidad, anhelando hallar otras como ella. 
-Preciosa como las joyas. 
-Esposa fiel. 
-De buen trato. 
-Trabajadora 
-Preocupada de su familia. 
-Buena jefa.
-Organizada.
-Inversionista. 
-Emprendedora. 
-Excelente en trabajos artísticos. 
-Misericordiosa. 
-Solidaria.
-Previsora. 
-Honorable. 
-Mesurada en su hablar. 
-Cercana a sus hijos. 
-Devota de Dios. 
-Dichosa. 

El escritor Lemuel detalla los rasgos de una persona  perfecta, la meta de un carácter  cristiano que años más tarde propondría el apóstol Pablo en su carta a los Gálatas, capítulo 5 como el fruto del Espíritu, la obra del Señor en el corazón. 
   
Cuando se observa un ideal hay una tendencia a desanimarse y a olvidar el consejo. Pero el Señor siempre da ánimo a través de su Palabra:
"No, amados hermanos, no lo he logrado,  pero me concentro únicamente en esto: olvido el pasado y fijo la mirada en lo que tengo por delante, y así  avanzo hasta llegar al final de la carrera para recibir el premio celestial al cual Dios nos llama por medio de Cristo Jesús."
(Filipenses 3:113-14 NTV)
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miércoles, 10 de noviembre de 2021

Defensores.


“Defiende al que no puede argumentar en un juicio, 
examina la causa que hay contra los desvalidos, 
investiga las declaraciones del pobre 
y hazle justicia. 

“ Proverbios 31:8-9 (paráfrasis) 

Mi amiga Blanca nos dio este consejo: “Nunca entren a un Juzgado sin estar acompañadas, puede ser peligroso que estén solas”. En su experiencia sabía que para nosotras ese consejo era valioso.

Benja Z. estaba en una oficina esperando el pago de una factura. 
De pronto todo fue un avasallamiento sorpresivo, gritos apremiantes, movimientos bruscos, alguien lo tiró al suelo, la PDI (*) estaba realizando una redada, todos fueron detenidos. Benja no entendía nada. Lo llevaron a una celda, trató de explicar que solo estaba ahí para cobrar una cuenta, nadie lo escuchaba. 
Cuando logró salir después de varios días, nadie le pidió disculpas, un malentendido, un mal rato que desea olvidar, pero no se olvida. 

La madre de Lemuel está muy consciente del poder que los hombres llegan a detentar y la responsabilidad que viene adjunta a ese poder. 
Una persona puede usarlo para defender el bien común o para escalar un peldaño más en su clase social.
Dios tiene  sumo interés en las acciones de justicia, tanto que en diferentes épocas enfrenta a su pueblo con duras reprensiones: 
Tus gobernantes son rebeldes, cómplices de ladrones; todos aman el soborno y van detrás de las prebendas. No abogan por el huérfano, ni se ocupan de la causa de la viuda.”
(Isaías 1:23)
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La noticia del día:
Carrera de autos antiguos de finales del siglo XIX en Brighton, noviembre 2021. 



martes, 9 de noviembre de 2021

Las excepciones.


(Continuó la madre de Lemuel:)
"Dale licor a los enfermos terminales 
para menguar sus dolores. 
 Ofrécele un calmante 
al que está deprimido,
 a aquellos que viven duras realidades, 
ayúdales en sus penas."

Proverbios 31: 6-7 (paráfrasis)

En la entrada anterior la madre de Lemuel le instruye en los desastres que provoca el licor en la salud y el comportamiento humano. 
Sin embargo toda regla tiene una excepción; hay circunstancias donde ayudar un corazón destrozado y un espíritu abatido es más importante que mantener a rajatabla una ley. 
Muchas veces el estado terminal de una persona necesita un paliativo. 
Tal vez en el tiempo de Lemuel no había muchas ayudas médicas como hoy, gracias a Dios por aquellas personas que trabajan con dedicación y solidaridad con los enfermos. 

Sin embargo, más allá de las ayudas corporales, está Cristo y su mano de compasión extendida para los afligidos y necesitados. 
Nosotros podemos dar un refrigerio pero comparado al que da el Señor no hay nada que lo supere. 
Él es tu Sanador, Él es el Pan que descendió del cielo, Él es el agua de vida eterna, Él es el mejor compañero en las noches oscuras del alma, solo Cristo tiene absolutamente todo lo que un ser humano necesita. 
Por otra parte las promesas de Dios son eternas:"Yo, por mi parte, los consolaré a ustedes, como una madre consuela a su hijo." 
(Isaías 66:13 (TLA) 

***

Te regalo una bella canción:


Soy una prueba viviente 
 de lo que la misericordia de Dios puede hacer 
Si me conocieras entonces, me creerías ahora 
 Cambiaste mi vida entera 
Tomaste lo viejo y Él lo hizo nuevo 
 Eso es justo lo que la misericordia de Dios puede hacer 
 Ahora estoy vivo para contar la historia 
 ¿Cómo lo he superado? 
Es su bondad y misericordia y el poder de su sangre...




lunes, 8 de noviembre de 2021

Beber o no beber, he ahí una cuestión.


Continuó diciendo su madre: 
Querido Lemuel: 
Los gobernantes 
no pueden permitirse el lujo de emborracharse con bebidas alcohólicas.
Más que hacer el ridículo, la resaca puede impedirles distinguir entre lo bueno y lo malo, 
cuestión peligrosa para la justicia de una nación. 

Proverbios 31:4-5 (paráfrasis)


Bebo mate. 
Bebo té. 
Bebo leche sin lactosa. 
Bebo agua, con gas, sin gas. 
Bebo infusiones de hierbas, menta, anis, melisa, rosa mosqueta.
Bebo café de higo y trigo, una mezcla tostada, exquisita. También un capuchino de tarde en tarde.
Bebo jugos de verduras verdes y a veces de frutas cítricas.
Bebo leche de almendras. 

Dejo de beber mate por razones digestivas. 
Bebo menos té, un doctor puntilloso dice que inhibe la acción del hierro. 
Retomo el mate, la fuerza del placer se impone, reconozco mi debilidad. 
Bebo té masala, cuando una amiga me invita. 

Mi tío Enrique sostenía que “entre beber y no beber, es mejor beber”, razón por la que “empinaba el codo” cada fin de semana, llegaba a casa arrastrando los pies, gracias a Dios no tenía documentos de conducir. Alguna vez llegó a casa en una patrulla de carabineros después de estar detenido, sin conciencia del mundo o de sí mismo. No podía vivir sin beber vino hasta que estuvo al borde del precipicio, hospital, operación, ultimátum, "o dejas el licor o te mueres".
 
Y tú ¿qué bebes?
***
Alguna vez hablamos de las 12 mejores bebidas:





domingo, 7 de noviembre de 2021

-¿Qué te diré, hijo mío?


Habló la madre de Lemuel: 
-¿Qué te diré, hijo mío? 
-¿Qué sabiduría puedo compartir, hijo de mi vientre? 
-¿Qué conocimiento puedo comunicarte, hijo de mis oraciones? 
 No desperdicies la fuerza de la unción en mujeres desenfrenadas;
no inviertas en mujeres que destruirían incluso a un rey, 
sería lamentable. 

Proverbios 31:2-3 (paráfrasis) 

Hay una historia que nos muestra con una claridad asombrosa el peligro de las pasiones desmedidas: 
“Entonces Dalila exclamó: 
—¿Cómo puedes decir que me amas, si me sigues engañando? 
¡Ya es la tercera vez que te burlas de mí, y todavía no me dices cuál es el secreto de tu gran fuerza! 

Todos los días Dalila seguía insistiendo con la misma pregunta, y tanto se hartó Sansón que se quería morir. 
Finalmente, Sansón le confesó a Dalila su secreto: 
«Jamás se me ha cortado el cabello, porque antes de nacer fui dedicado a Dios como nazireo. 
Si me cortaran el cabello, perdería mi fuerza y sería como cualquier otro hombre». 
Dalila comprendió que esta vez Sansón le había dicho la verdad, y mandó este mensaje a los jefes filisteos: 
«Vengan acá otra vez, porque ahora sí me ha dicho la verdad». 
Entonces los jefes filisteos volvieron con el dinero en la mano Dalila hizo que Sansón se durmiera recostado en su falda, y mandó llamar a un hombre para que le cortara las siete trenzas. 
Después comenzó a maltratarlo, y le gritó: 
«¡Sansón! ¡Los filisteos te atacan!» 
Sansón despertó pensando que iba a librarse como antes, pero no sabía que Dios ya lo había abandonado. 
Los filisteos lo sujetaron y le sacaron los ojos; luego se lo llevaron a Gaza, le pusieron cadenas de bronce, y lo obligaron a trabajar en el molino de la cárcel."
(Jueces 16:15-21 TLA)
***