es un Dios tierno y cariñoso
que protege a los indefensos.
Yo no tenía quien me defendiera,
y él vino en mi ayuda.
Dios mío,
tú has sido bueno conmigo;
ya puedo dormir tranquilo.Salmos 116:5-7 TLA
*
Pasamos un tercio (o casi) de la vida durmiendo.
Dormir en paz es esencial para la buena salud, el sistema nervioso funciona perfecto y se evitan diversas patologías.
Solo practicar el simple hábito de dormir las horas adecuadas.
La Clínica Mayo nos provee algunos consejos:
"1. Sigue un horario de sueño
Dedica no más de ocho horas a dormir. Acuéstate y levántate a la misma hora todos los días, incluidos los fines de semana.
2. Presta atención a lo que comes y bebes
Evita las comidas pesadas o abundantes un par de horas antes de acostarte.
3. Crea un ambiente de descanso
Mantén tu habitación fresca, oscura y silenciosa.
Hacer actividades relajantes antes de acostarte, como darte un baño o utilizar técnicas de relajación, puede promover un mejor sueño.
4. Limita las siestas diurnas
Limita las siestas a no más de una hora y evita dormir la siesta tarde.
5. Realiza actividad física como parte de tu rutina diaria
La actividad física regular puede promover un sueño mejor.
Pasar tiempo al aire libre todos los días también podría ayudarte.
6. Controla las preocupaciones
Intenta resolver tus preocupaciones o inquietudes antes de acostarte. Anota lo que tienes en mente y luego déjalo para mañana.
Comienza con lo básico, como organizarte, establecer prioridades y delegar tareas."
Los creyentes tenemos una ayuda fundamental en la conversación con el Señor, tal como lo hacía el salmista al contarle sus preocupaciones.
*
Audiolectura de hoy:
Salmos 116-118 TLA
https://www.youtube.com/watch?v=WaOaD6EgS9w
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