martes, 8 de junio de 2021

Invitación a comer (parte dos)


El tacaño te invita a comer con un escondido interés; 
te dirá ¡come!, ¡bebe!, 
pero mirará cuán costosa será la cuenta. 
Su mezquina invitación te dará dolor de estómago cuando te des cuenta de su hipocresía.

Proverbios 23:6-8 (paráfrasis) 

En los evangelios se relata una interesante historia acerca de una invitación a comer. 

Un fariseo (*) invitó a Jesús a comer. 
Fue, pues, Jesús a casa del fariseo y se sentó a la mesa. 
Vivía en aquella ciudad una mujer de mala reputación que, al enterarse de que Jesús estaba en casa del fariseo, tomó un frasco de alabastro lleno de perfume y fue a ponerse detrás de Jesús, junto a sus pies.

La mujer rompió a llorar y con sus lágrimas bañaba los pies de Jesús y los secaba con sus propios cabellos; los besaba también y finalmente derramó sobre ellos el perfume. 

 Al verlo, el fariseo que había invitado a Jesús se dijo para sí mismo: 
“Si este fuera profeta, sabría quién es y qué reputación tan mala tiene la mujer que está tocándolo”. 
Entonces Jesús se dirigió a él y le dijo:
— Simón, quiero decirte una cosa. Simón le contestó: 
— Dime, Maestro. Jesús siguió: 
— Había una vez un acreedor que tenía dos deudores, uno de los cuales le debía diez veces más que el otro. Como ninguno de los dos podía pagarle, los perdonó a ambos. ¿Cuál de ellos te parece que amará más a su acreedor? 
Simón contestó: 
— Supongo que aquel a quien perdonó una deuda mayor. Jesús le dijo: 
— Tienes razón. 
Y volviéndose a la mujer, dijo a Simón: 
— Mira esta mujer. 
Cuando llegué a tu casa, no me ofreciste agua para los pies; en cambio, ella me los ha bañado con sus lágrimas y me los ha secado con sus cabellos. Tampoco me diste el beso de bienvenida; en cambio ella, desde que llegué, no ha cesado de besarme los pies. Tampoco vertiste aceite sobre mi cabeza; pero ella ha derramado perfume sobre mis pies. 
Por eso te digo que, si demuestra tanto amor, es porque le han sido perdonados sus muchos pecados. 
(Lucas 7:36-47)
 ***


La palabra del día: fariseo.
fariseo, a Del lat. tardío Pharisaeus, este del gr. Φαρισαῖος Pharisaîos, este del arameo pĕrīšayyā, y este del hebr. pĕrūšīm 'separados [de los demás]'. 

1. adj. Seguidor de una secta judaica que aparentaba rigor y austeridad, pero eludía los preceptos de la ley y, sobre todo, su espíritu. Apl. a pers., u. t. c. s. 

2. adj. Perteneciente o relativo a la secta de los fariseos o a sus miembros. 

3. adj. hipócrita. Apl. a pers., u. t. c. s. 4. m. coloq. desus. Hombre injusto, cruel, inhumano.


***
Invitación a comer (parte uno)




No hay comentarios:

Publicar un comentario