Así que dejemos de repasar una y otra vez las enseñanzas elementales acerca de Cristo. Por el contrario, sigamos adelante hasta llegar a ser maduros en nuestro entendimiento.
Hebreos 6:1 NTV
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¿Recuerdas tu primer día de escuela?
¿Recuerdas cuando dejaste el hogar de tus padres?
¿Recuerdas cuando ingresaste a tu primer trabajo?
Para llegar a este punto de la existencia has pasado por varias etapas.
Y en la vida devota es similar.
¿En que punto está tu crecimiento?
¿Ya estás discipulando a otros?
¿Ya tienes claro tu propósito?
¿Ya estás ejerciendo tus dones?
La vida de fe es de largo aliento; la madurez es un proceso natural y esperable de toda persona que ha nacido en Cristo.
A veces pareciera que avanzar es sencillo, otras más complejo.
En muchas ocasiones sentirás que te detienes, que el mundo se confabula para que todo salga mal.
El Señor Jesús siempre está ahí.
Él prometió: Y yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo
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Audiolectura de hoy:
Hebreos 6
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Ilustración:
Dos mujeres enseñan a caminar a un niño.